Gin & Tonic
>> martes, 27 de mayo de 2008
El Gintónic Perfecto no reside en la misteriosa fórmula a la hora de prepararlo. No reside en no cometer la equivocación de echarle el zumo del limón o la lima (Diós, que blasfemia es esa!?), no. Ni siquiera tiene que ver en que en lugar de vaso gordo, se sirva en copa pecera, como debe de ser, tampoco. Ni en los hielos, ni mucho menos.
El Gintónic perfecto es aquel que te tomas en la mejor de las compañías.
Aquel con el que brindas por la salud de los presentes y de los que ya no están, recordando lo que fueron y significaron.
Aquel que te bebes compartiendo espacio, palabras, risas...
El Gintonic perfecto lo es cuando todo está alineado para que la noche sea, simplemente, genial.
Os dejo una foto de lo que, además del Gintónic más caro del mundo, fue uno de mis mejores gintónics en la Capital, pese a que su preparación me pareciera simplemente regulera, peeero... ah, el misterio de la conjunción, señores!
Un beso!
3 comentarios:
Me alegro de que lo disfrutaras, Reina. Me voy a poner uno, creo... hummmmm
el gin tonic era lo que tomaba yo cuando comenzaba a salir por ahí de farra. No había bebida más glamourosa que la mezcla de la ginebra con la tónica (bueno, sí, el dry martini, mezclado, no agitado...). Con el tiempo, me di cuenta que para esos momentos, lo mejor era la cerveza... Es más barata, puedes beber todo cuanto tu vejiga te permita y el pedo es mucho más dulzón
Brindo contigo
a poco podría pasar por una portada de pink floyd.
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